Cuando hablamos de menores hiperquinéticos, nos referimos a un número pequeño de niños que han sido inquietos desde chicos, al momento de aprender a caminar y cuando entraron al jardín infantil.
Se caracterizan por presentar problemas en el colegio, en la casa y en los paseos.
Los retan constantemente porque se levantan del banco, están siempre moviéndose y haciendo ruido; se columpian en el asiento, se les cae el lápiz y se interrumpen a sí mismo en su trabajo, perjudicando su aprendizaje.
Además, tienen dificultad para concentrarse y hacer otras cosas en la sala de clases.
En ocasiones presentan impulsividad. Esto significa que no se detienen a pensar antes de actuar.
Hacen rápidamente lo primero que se le pasa por la cabeza, metiéndose en problemas.
Lo importante es saber que existen varios sistemas para solucionar la hiperquinesia.
Para ello, hay que hacer un diagnóstico cuidadoso para saber de qué tipo de inquietud motora se trata y por qué se ha producido.